
En el marco del Simposio Internacional Publicidad no sexista, la funcionaria federal destacó que a lo largo de nuestra historia han sido insignificantes los detalles que han llevado a las mujeres y a los hombres a vivir en realidades distintas, en desigualdades no reconocidas y subestimadas por muchas personas simplemente porque lo asimismo como natural.
La comunicación, dijo, es un esquema social profundo en el cual se ha dejado mucho que desear: “pensar en la publicidad o en las áreas de Comunicación Social como una arista importante para construir nuevas sociedades hace 20 años, quizás 10, era impensable.
Aseguró que ejercer el periodismo, la publicidad o la comunicación gráfica, visual o cualquiera de sus diversificaciones no sólo nos limita a reflejar las realidades del mundo en el que nos desenvolvemos: “cuando nos vemos inmersos en una dinámica nueva de cómo comunicar es justo repensar y establecer parámetros éticos novedosos que nos lleven a jugar con nuestras realidades en el espejo”.
De esa manera, explicó, se solicitó que los lineamientos de campañas de la Secretaría de Gobernación para la administración pública federal incorporara como criterios básicos la igualdad y la no discriminación por motivos de sexo.
Acto seguido, agregó, con el recurso etiquetado desde la Cámara de Diputados surgió el monitoreo de campañas que durante 2009 y 2010, incuso en lo que va de este año, se ha realizado analizando a profundidad la manera en que estamos desde el gobierno representando a mujeres, hombres, niñas, niños, pueblos indígenas, adultos mayores, grupos vulnerables y en general a toda la población por la que se trabaja.
Los resultados, expuso, fueron asombrosos y nada halagadores, por eso se decidió hacer, con el apoyo de organismos y consultorías de expertas y expertos algunos productos como manuales y poco después una guía que permitiera tener el ABC de cómo tener las nociones básicas de trabajo para comunicar sin discriminar.
“Hemos caído en un aletargamiento, en una comodidad donde no hemos sabido del todo innovar en el campo de la comunicación para transformar”, indicó.
Velázquez Alcalá manifestó: “Quienes trabajamos en alguna de las ramas de la comunicación no sólo reflejamos lo que creemos ser, también tenemos el poder de transformar, de construir y reconstruir sociedades nuevas sin importar cuántos años hemos cargado con patrones culturales que no han sido de gran apoyo para vivir con las libertades que presumimos desde ideas revolucionarias como aquellas plasmadas en la Revolución francesa o cualquier otro movimiento social que podamos recordar en este momento”.
Finalmente, apuntó que aún existen las desigualdades tácitas por el hecho de ser mujer, de ser indígena o tener un color de piel o ideas que no corresponden a lo que mejor nos parece desde la individualidad. Es honesto reconocerlo, pero será sabio operar para erradicarlo.
Fuente: INMUJERES