INMUJERES y el PNUD realizan foro sobre igualdad en el mundo laboral con la participación de más de 50 empresas de once países

La secretaria ejecutiva del Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), María Elena Alvarez Bernal, señaló que la igualdad de género todavía no acaba de permear en la cultura y todavía no se logra que en las leyes se considere totalmente iguales a mujeres y hombres. 
 
Durante la inauguración del Primer Foro Regional “Empresas por la igualdad de Género”, la funcionaria federal reconoció que es necesario impulsar mayores acciones para la igualdad entre mujeres y hombres, ya que la igualdad es una oportunidad para que las empresas sean sanamente productivas y competitivas.
 
Alvarez Bernal manifestó que se debe incorporar la igualdad laboral como parte de las políticas integrales de las empresas, donde se incluya la flexibilización de horarios, impartir capacitación en género, facilitar el acceso a servicios de cuidado para mujeres y hombres, equidad en salarios y promover la conciliación vida familiar-laboral. 
 
La secretaria ejecutiva del INMUJERES destacó que hacer de la equidad de género una realidad en la vida de cada día es un compromiso de los Estados con las mujeres. 
 
Precisó que uno de los mayores activos de las mujeres es el tiempo. La Encuesta Nacional de Uso del Tiempo (2009) señala que las mujeres mayores de 12 años ocupan semanalmente el nueve por ciento de su tiempo al trabajo para el mercado, contra el 22.2 por ciento que dedican los hombres. En contraste, las mujeres  realizan el 76.5 por ciento del trabajo doméstico y de cuidados y de apoyo para otros integrantes del hogar. 
 
En México, detalló, se ha impulsado una política pública exitosa con el Modelo de Equidad de Género (MEG), que actualmente ha logrado que más de mil 200 empresas se certifiquen y este año, con las que se incorporan, se estima que su número llegue a dos mil. 
 
Señaló que el MEG, en las organizaciones mexicanas, ha demostrado que mejora el clima laboral, reduce el ausentismo y la rotación del personal, con lo cual se incrementa la productividad; genera más compromiso con la empresa; se aprovechan de forma más eficaz las competencias y saberes de mujeres y hombres; y todo esto redunda favorablemente en mejores oportunidades para las mujeres. 
 
Alvarez Bernal detalló que gracias a este avance, México se ha colocado como un referente para el desarrollo con un Sello de Igualdad Internacional, que se impulsa en la Comunidad de Sellos. 
 
Esta Comunidad agrupa a Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Panamá, República Dominicana y Uruguay, junto con México, que cuentan con Programas de Certificación en Igualdad de Género. 
 
La política empresarial de género, con base en instrumentos y mecanismos como el MEG, el Sello Internacional, Programas e Instituciones permitirá alcanzar la igualdad entre mujeres y hombres, concluyó. 
 
Con el objetivo de compartir experiencias, recoger los avances y definir nuevas estrategias para sumar a más empresas y países a los Sellos de Igualdad, el Primer Foro Regional de Empresas por la Igualdad de Género reunió a más de 40 empresas de México y más de 17 empresas certificadas de once países de América Latina y el Caribe.
 
Desde 2003 más de 1400 empresas han sido certificadas con Sellos de Igualdad de Género en cinco países de la región, a través de los Programas de Certificación de Sistemas de Gestión en Igualdad de Género. 
 
Los programas Sello de Igualdad de Género se orientan a transformar la gestión de los recursos humanos y la forma en que las empresas públicas y privadas, pero también las organizaciones, abordan sus negocios. Estos Programas apuntan a garantizar el ejercicio de derechos laborales por parte de trabajadores y trabajadoras y a eliminar las barreras para la inserción y el desarrollo profesional de las mujeres en el mundo laboral. Las empresas comprometidas con la igualdad de género son reconocidas con un Sello de Igualdad. 
 
México, Uruguay, Costa Rica, Brasil y Chile integran desde 2009 la Comunidad del Sello, un espacio de intercambio y de cooperación sur/sur facilitado por el PNUD para fortalecer este tipo de prácticas. Recientemente se han sumado a esta iniciativa empresas y organismos públicos que promueven la igualdad de género de República Dominicana, Cuba, Honduras, Nicaragua, Colombia y El Salvador. Todos estos países participarán en el foro con representantes de gobierno, empresas y agencias del Sistema de Naciones Unidas. 
 
Durante los dos días de duración del Foro analistas y especialistas internacionales expusieron sobre mejores prácticas empresariales. Entre otros temas se abordaron los avances, desafíos e iniciativas novedosas sobre conciliación entre la vida familiar, laboral y personal y la corresponsabilidad en las empresas o el impacto de la igualdad de género en la productividad y competitividad. A lo largo del evento también se debatió sobre las estrategias a seguir para acabar con el hostigamiento y acoso laboral y sexual en las empresas, la igualdad de género en el desarrollo de la carrera profesional y el papel de las mujeres en los puestos de decisión de las empresas. 
 
Los programas actualmente en funcionamiento son: El Programa Pro Equidad de Género, de la Secretaria de Políticas para las Mujeres de Gobierno Federal del Brasil; el Sello Iguala, de Servicio Nacional de la Mujer SERNAM de Chile; el Sistema de Gestión de Igualdad y Equidad de Género (SIGEG), a cargo del Instituto de las Mujeres de Costa Rica; Modelo de Equidad de Género (MEG), del Instituto Nacional de las Mujeres del Gobierno Federal de México; Programa de Gestión de la Calidad con Equidad de Género, del Instituto Nacional de las Mujeres del Uruguay. 
 
En Colombia, Cuba, El Salvador, Nicaragua, República Dominicana, entre otros países, se están iniciando también programas de este tipo. 
 
Fuente: PNUD e INMUJERES